¿CÓMO MANEJAR LAS DIFERENCIAS EN PAREJA SIN RABIETAS?

Cada persona tiene una forma de ser única y eso provoca que muy a menudo las parejas sostengan puntos de vista diametralmente opuestos.
Ok, ¿Pues que hay de nuevo?
(Solo repasando…)
Y aunque es normal tener enfoques contrapuestos, a veces eso genera tensiones y conflictos que ponen en riesgo la armonía y la felicidad de la pareja.
Existen muchas maneras de afrontar las situaciones y hoy aquí encontrarás algunas estrategias para manejar esas diferencias sin tener que halarte los pelos.
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¿Cómo manejar las diferencias en pareja sin las rabietas?
Ya sabemos que en una relación debe reinar la armonía. La idea de juntarse con otra persona es pasársela bien y a la vez, librarse de una constante guerra de poderes.
Para manejar las diferencias en la pareja de manera efectiva, es fundamental comenzar por identificarlas.
Comúnmente, las diferentes opiniones o enfoques radican en áreas como el manejo de los hijos o nietos, la gestión del dinero, la organización del hogar o la planificación del tiempo libre.
Otras veces resulta ser en situaciones mucho más serias como la infidelidad, problemas legales o serios problemas de personalidad que arrasan con la relación.
Reconocer estas diferencias y hablar de ellas abiertamente es el primer paso para evitar que se conviertan en fuentes de un eterno conflicto y terminen en una ruptura.
Es importante recordar que tener diferencias no significa que uno tenga razón y el otro esté equivocado, sino que simplemente se ven las cosas desde perspectivas diferentes.
Por lo tanto, el respeto y la empatía son fundamentales para abordar las situaciones conflictivas.
¿Por qué repito a mis padres en mis parejas?
¿Basta con reconocer las áreas en las que la pareja tiene diferencias de opiniones o enfoques? Mira que no.
Necesitas tácticas que se puedan practicar para manejar y vencer el asunto. Aquí te dejo algunas:
Negociar es el camino, amiga…
La negociación es un proceso en el que la pareja puede llegar a acuerdos que les beneficie a ambos.
Cuando una pareja carece de habilidades de negociación esto puede desembocar en discusiones y conflictos constantes e innecesarios.
Si una pareja no puede llegar a un acuerdo sobre temas básicos como el dinero, la crianza de los hijos/nietos o la distribución de las tareas del hogar, esto puede generar resentimiento y frustración en ambas partes.
Aprender a negociar de manera efectiva puede ayudar a evitar estos problemas y a construir una relación más saludable y feliz.
Amen de manejar situaciones terribles como el abandono, las micro infidelidades o serios retos legales a causa de una conducta impropia que ha presentado uno de los dos.
Pero, además, saber negociar también puede asistir en fortalecer la comunicación y la confianza.
Esto conduce a que ambas partes se sientan escuchadas y respetadas.
La negociación no significa ceder en todo, sino encontrar un equilibrio que beneficie a ambos y ese resultado se logra con un diálogo inteligente.
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Te conviene trabajar en equipo
Cuando los miembros de una pareja se comprometen a trabajar en unión pueden solucionar retos y tomar decisiones de manera más efectiva.
Esto significa que pueden evitar conflictos innecesarios y reducir la tensión en la relación a pesar de sus diferencias.
Trabajar en equipo ayuda a fomentar la confianza y la lealtad en el enyunte.
Si ambos se sienten apoyados y valorados, es menos probable que se sientan resentidos o frustrados por lo que evitarán los constantes choques dentro de la relacion.
Un verdadero equipo utiliza las diferencias para complementarse y no para atacarse.
El trabajo en equipo permite compartir las responsabilidades y tareas. Así son las relacione saludables y felices.
Reconociendo la temida relación unilateral…
El dialogo en el momento y lugar adecuado
La mayoría de las discusiones de pareja surgen porque éstas se llevan a cabo en un lugar impropio para conversar acerca de lo que nos perturba.
Gaby tiene 40 años de casada y un día le pregunté cómo resolvía los problemas con su esposo.
Ella me comentó que una de las técnicas que utilizaba y con la cual lograba resolver las situaciones importantes era hablarle de los problemas en el momento y en el lugar adecuado.
En casa tenía una habitación especial. Era la oficina de Manuel.
Allí se encerraban, se apartaban de los hijos y nietos y analizaban todas sus diferencias.
Cuando cualquiera de los dos decía ‘tenemos que hablar’ se retiraban a esa habitación y ya sabían que se trataba de algo importante.
Dialogar sobre los sucesos significativos en el momento y lugar adecuado ayuda a garantizar que la comunicación sea efectiva y constructiva.
Se pueden evitar malentendidos y conflictos innecesarios.
Además, esto permite que ambas partes estén preparadas para tener un efectivo intercambio y puedan concentrarse en el tema en cuestión.
Si se aborda un tema de mucha seriedad en un momento impropio o en el lugar inadecuado, pueden surgir una serie de consecuencias negativas.
Por ejemplo, se asoman los malentendidos, ya que ambas partes pueden estar distraídas o lejos de estar preparadas para tener una conversación relevante.
También puede hacer presencia el resentimiento o frustración si una de las partes siente que no se le está prestando suficiente atención o que abiertamente se le está ignorando.
Utiliza tu lengua…o mejor dicho tu lenguaje…
En cualquier conversación es importante usar un lenguaje adecuado para evitar discusiones porque esto ayuda a garantizar que la comunicación sea efectiva y respetuosa.
El lenguaje que usamos puede tener un gran impacto en cómo se percibe nuestro mensaje y en cómo responda la otra persona.
Si usamos un lenguaje agresivo o despectivo, es más probable que la otra persona se sienta atacada o insultada, lo que puede llevar a una guerra sin fin.
Pero, si usamos un lenguaje respetuoso y claro, propiciará que la otra persona se sienta escuchada y comprendida, lo que en definitiva puede ayudar a evitar malentendidos y conflictos innecesarios.
El tono de voz y el lenguaje corporal son increíblemente relevantes al comunicarnos.
Un tono de voz agresivo o un lenguaje corporal defensivo, hará que la conversación se torne tensa, así que hay que tener cuidado con eso.
Practicar la respiración y otras técnicas de relajación ayuda a que podamos expresarnos de una mejor manera cuando queremos tratar nuestras diferencias.
Sin astucia, nada
Sí. El amor es muy importante para poder manejar las diferencias entre parejas.
Cuando amas a tu pareja y te amas a ti misma se supone evitas los disgustos y las complicaciones que los acompañan.
Con amor eres más comprensiva y tolerante con los desafíos de tu pareja.
Pero, ojo esto aplica solo cuando tienes una relación sana y saludable…porque en las relaciones de parejas tóxicas donde el amor y la buena intención están ausentes esto no ocurre y las diferencias más bien lo que hacen es detonar las emociones exageradas.
Aquí entra la astucia como la vamos a describir a continuación:
Debes tener control de tus emociones y por ende tus reacciones. El autocontrol es rey.
Pendiente al más mínimo detalle, que no se te valla una. Actúa segura de ti misma en tofo momento.
El titubear en tus expresiones abona muy poco a la solución de conflictos.
Aprovecha la oportunidad para solucionar de forma creativa el reto y cuando ambos estén de acuerdo serán los ganadores.
Manipular no es tan malo
Al manipuleo se le ha dado una mala fama. Observa que todos lo utilizamos a diario como táctica para conseguir lo que deseamos.
Muchas lo hacen a propósito y otras/os simplemente están tan acostumbrados que les sale sin ningún esfuerzo.
Sin la necesidad de ser cínica o perversa, aprende a observar la conducta de tu compañero y decide si te conviene o no y en base a esa información traza una estrategia ventajosa para ti sin hacerle daño al otro.
Por lo general, cuando algo es bueno para una parte en la pareja, el otro se beneficia. O sea, hay ganancia para ambos el que tu estes contenta.
Para resumir…
Puede que sea mas complejo que lo que se trae aquí, pero por algún sitio tenemos que comenzar…
Ya pronto te presentaremos el libro MUJERES MALAS Y LAS BUENAS TACTICAS QUE UTLIZAN PARA… (Te digo después.) donde expandiremos en estos temas de la astucia y manipulación tan interesantes y siempre atropellados.
¡Un Abrazo!
Así se ve el apego ansioso…para que no caigas en él…
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