Una de las lecciones que debemos dominar en la vida es el cómo manejar el rechazo amoroso. Es duro, duele, pero cuando se presenta hay que aceptarlo y poco a poco asimilarlo.
Que alguien te rechace no tiene por qué ser el fin del mundo (aunque así lo sientas). A fin de cuentas, todos en algún momento hemos tenido que darle un ‘no’ a alguien.
Estoy segura de que a ti te ha tocado rechazar a varias personas y aunque te hayas sentido mal en el proceso, puede haber resultado ser tu mejor opción.
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Es importante que sepas que el rechazo no necesariamente tiene que ver contigo.
Puede que a esa persona le esté sucediendo algo que redunde en tener que apartarse de ti y al hacerlo tú lo interpretas como rechazo a tu persona.
Ahí hay mucha tela pa’ cortar…
Todos hemos sido rechazados alguna vez, ya sea por un entrevistador de trabajo, por un amigo o una posible pareja.
Saber gestionar efectivamente el rechazo es algo obligatorio.
Si quieres aprender a afrontar mejor el rechazo y continuar con tu vida, aquí tienes algunas sugerencias para lograrlo.
El rechazo amoroso…doloroso, pero sobrevivirás
Existen distintas fuentes de rechazo: de amigos, familiares, desconocidos en la calle, empleadores, pero una de las más devastadoras es la que emana de nuestro amorcito.
Es de esperarse sentirse herido por un rechazo, eso no significa que seas débil o menos digna que los demás.
Significa que eres humana y reaccionas como todo ser vivo responde a un repudio de una persona que es significativa para nosotras.
A lo largo de la vida te toparás con personas que quieren relacionarse contigo y otras que mostrarán apatía o incluso el temido codazo a tu persona.
A todas nos ha pasado o nos pasará y se requiere valentía para darle cara.
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Quizás revisar tus reacciones habituales y las palabras que salen de tu boca podría ayudarte.
Considera que si eres una persona conflictiva, criticona o pesimista propiciarás que mucha gente se aparte de tu lado.
Autoevalúate y si tienes que cambiar algo de tu personalidad …trabájalo…te conviene.
Sé buena contigo misma
Ya habíamos expresado que un sinnúmero de personas en algún momento de su vida son rechazadas por alguien.
El rechazo es parte integral de la interacción social y todas lo hemos experimentado.
Es crucial que no tomes el rechazo como algo personal, ni que le busques las 5 patas al gato.
¿Qué significa esto? …que no debes culparte ni pensar que eres la peor persona del mundo, que no te mereces nada en la vida, que eres desdichada o desafortunada porque alguien te haya rechazado.
A veces un ‘no’ de una pareja constituye la llave para nuevas oportunidades.
“Como yo lo veo, si quieres un arcoíris tienes que aceptar la lluvia.” Dice la amiga Dolly Parton.
Hace dos años Cristina conoció a un hombre muy interesante. Todo un caballero y como dicen, ‘de película’. Apuesto, adinerado, independiente.
Parecía ser el hombre perfecto para sostener una relación.
Sin embargo, tenía un defecto…era muy mujeriego y rehusaba compartir en una relación de compromiso.
En su vida atravesó 3 divorcios y ya eso era una mala señal. Cristina se arriesgó a salir con él y luego de 6 meses de “citas” él la cambió por otra.
Era algo que se veía venir, pero Cristina era demasiado optimista y pensó que podía cambiarlo.
Ella es de las que cree que las personas cambian por amor. Pero, no. No fue así y le dolió muchísimo haber sido rechazada por ese galán.
Primero piensa en ti y luego en otros. Sé buena contigo misma.
Inunda tu mente con nuevas ideas
Medita, haz yoga, sal a caminar, ve al gimnasio. El ejercicio te ayudará a calmar la mente y el cuerpo cuando te enfrentas al rechazo de los demás, sobre todo si ese rechazo te ocurre a menudo en la vida.
De ser así decide buscar la razón rápidamente con un terapeuta que te guíe hacia el descubrimiento de la falla.
Reiteramos que la actividad física es una forma eficaz de afrontar el rechazo, porque te ayuda a liberar endorfinas en el torrente sanguíneo, las hormonas del bienestar que hacen que la gente se sienta feliz.
Carta a ese amor que te hirió….
Cristina, cuando terminó su relación, se encerró en la casa. Solo ingería comida chatarra, dormía y se mantenía pegada a la tele.
Estaba deprimida, no solo porque su hombre la había rechazado, sino más bien porque esa situación la había hecho revivir sus antiguos amores fracasados y eso resultaba en una pesadilla para ella.
“¿Pero otra vez?” ¿Qué fue lo que hice mal? ¿Será que mi destino es morir sola? Estas eran las preguntas que una y otra vez rondaban por su cabeza.
Recurrió a un terapeuta al no poder lidiar con la situación. El profesional la ayudó a comprender la base de su problema.
Una de sus recomendaciones fue que saliera de la casa y se enfrascara en alguna actividad que la ayudara a despejar la mente.
Cristina internalizó que no podía controlar lo que las otras personas hacían o pensaban. Su reto con la aceptación del rechazo venía desde su adolescencia cuando su padre abandonó a su madre.
Inconscientemente esa situación la había marcado y estaba repitiendo los mismos patrones en su vida.
¿Repites a tus padres en tus parejas?
El dolor del rechazo = dolor por fractura de tobillo
Cuando me enteré de que el dolor de un rechazo amoroso y el dolor físico en cualquier parte del cuerpo es procesado en la misma parte del cerebro me espanté…
O sea, si se me fracturó un tobillo o mi pareja me pega cuernos mi cerebro procesa ambos eventos como dolor sin importar de donde procede. (De la investigadora Naomi Eisenberg de UCLA).
¡Ahora la frase ‘me rompió el corazón’ cobra sentido! De ahí entonces surge que debemos tener mucho cuidado de cómo manejamos el rechazo.
Una respuesta inapropiada a ese suceso puede propiciar la aparición de serias condiciones médicas o emocionales que te afectarán de por vida.
Expresa tus sentimientos
Compartir tus sentimientos con una persona de confianza te ayudará a enfrentar la situación.
Esa persona puede ayudarte a ver las cosas desde otro punto de vista. Escucha sus planteamientos y analiza si hace sentido el darle más información.
Nunca olvides de compartir tu información con mucha cautela. No todo se puede divulgar. Practica el proceso con Esnúa y sin toalla…
No te aceptaron en un empleo, tus compañeros de equipo rehúsan compartir contigo, tu pareja te abandonó, sufriste un enfrentamiento con ese familiar distanciado…en fin, en casos como estos el hablar de tu situación te ayudará a liberarte y a encontrar una solución al problema.
Ana trabajó 5 años en una oficina como arquitecto. Su ejecutoria era sobresaliente. Un día su jefe anunció que dejaba el despacho y que vendría un nuevo dueño.
Cuando este llegó comenzó a cambiarlo todo incluso a las personas que laboraban allí. Ana fue despedida de la oficina.
Ella sentía que había sido castigada, pero en realidad era solo que el nuevo jefe quería armar su propio equipo con personas de su confianza.
Para Ana esto fue algo devastador. La habían rechazado a pesar de su amplio currículo. Al poco tiempo consiguió un nuevo empleo…y ganando el triple.
Eso no lo veía venir, ¡Pero que alegría!
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Moraleja: No todo lo que parece malo lo es…
A veces es necesario salir de la zona de confort y precisamente el ser rechazada puede propiciar que se abran tus puertas a cosas mejores.
Libérate del terror a la soledad con los 9 derechos de “ARES”
Rechaza todo rechazo
El rechazo forma parte de las posibilidades desagradables en nuestra vida, pero puedes aprender a afrontarlo.
Si necesitas un tiempo para aceptarlo, desahogarte y seguir adelante, muy bien, lo puedes hacer.
Ser rechazado debe ser un golpe pasajero y sus repercusiones también. De su efecto prolongarse entonces surgen las complicaciones tanto en la salud física como en el ánimo.
Recóbrate del desánimo de un rechazo. Busca la oportunidad inherente en esa percibida humillación y veras las cosas desde otro ángulo.
Ese ángulo que te hará crecer aumentando tu autoestima a niveles extraordinarios.
AHORA…SIEMPRE PUEDES MOVERTE HACIA OTRO LADO
Si el rechazo surgió dentro de una relación amorosa y el grado de la humillación fue intolerable según tu percepción, pregúntate si es mejor estar en otro lado.
Esa decisión requiere de bastante análisis ya que nuestra percepción puede estar errada y conducirnos a conclusiones incorrectas.
Lo que nunca debes permitir en una relación.
Al fin de cuentas ten presente que el rechazo es solo una opinión del que rechaza…
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¡¡Psst!! NO TIENE QUE VER CONTIGO…
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