La infidelidad es un tema que, aunque incómodo, es real y prevalente en las relaciones de pareja. Para comprender plenamente qué hay detrás de una infidelidad, es importante explorar tanto las causas subyacentes como sus posibles consecuencias.
Vamos a indagar en las razones que hay detrás de la infidelidad y te presentaremos estrategias para enfrentarla de manera saludable porque nadie está exento a sufrir por una infidelidad, sin importar la edad que tengas.
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Lo que hay detrás de una infidelidad
Ana y Luis llevaban cinco años juntos. Su relación siempre había sido sólida: compartían risas, sueños y, por encima de todo, una profunda confianza. Sin embargo, un día Ana notó que Luis estaba muy distante.
Llegaba tarde a casa, y sus conversaciones eran breves y evasivas. Ana no podía ni acercarse a su celular ya que, de inmediato, lo escondía y se ponía a la defensiva.
Ana se preguntaba, “Que diablos está pasando aquí?” Claro está, en lo más profundo de su ser ella sabía, porque conocía los indicios de una “puercá” pero como muchas amigas, no podía creer que le estuviera sucediendo a ella.
El miedo de conocer la verdad la mantenía paralizada y su desespero interno le impedía conciliar el sueño. Mientras, Luis bambaleaba feliz, y sin preocupaciones.
Y el sexo, ni se diga, siempre Luis tenía una excusa, cuando no era que le dolía la ciática se quejaba de cansancio extremo por ‘tanto trabajo’…
Todo continuó igual por meses hasta que un día Ana recibió una llamada misteriosa de una mujer que le dijo que su esposo le estaba pegando los cuernos.
En la noche, cuando Luis llegó a casa, Ana lo confrontó. Con una mezcla de valentía y miedo, le preguntó sobre la mujer. Luis, lucía sorprendido y lo negó.
Al día siguiente, con un nudo en el estómago, Ana decidió seguirlo. Él no sospechaba nada. Vio cómo Luis se dirigía a un café que no frecuentaban, y su pulso se aceleró.
Al entrar, lo vio sentado frente a una mujer que no conocía, riendo y compartiendo besos furtivos. El mundo se detuvo a su alrededor; el dolor y la traición la golpearon ese día.
Insatisfacción… ¿Camino directo a la Infidelidad?
¿Qué había pasado con su relación? ¿Por qué Luis de la noche a la mañana había cambiado? ¿Qué andaba mal?
Luego de dolorosos momentos de introspección, Ana encontró la fuerza para hablar con Luis, enfrentándolo con la verdad que ella ya conocía.
Aunque el camino estaría lleno de duelos y aprendizajes, sabía que ya no podía vivir en la sombra de la deslealtad. La confianza, reconstruida o no, siempre tendría un precio, pero decidió correctamente que su amor propio era innegociable.
Reconoció que las razones por las cuales su esposo le había sido infiel habían podido ser las siguientes:
1. Insatisfacción emocional y física
Una de las causas más comunes de infidelidad es la insatisfacción emocional o sexual dentro de la relación. Cuando una persona siente que sus necesidades no están siendo atendidas, puede buscar satisfacción fuera de la relación.
Esta insatisfacción suele ser el resultado de la falta de comunicación, intimidad sexual o apoyo emocional, llevando a la pareja a buscar lo que siente que le falta en otro lugar.
2. En búsqueda de su autoestima
En algunos casos, las personas pueden ser infieles para reafirmar su valor personal o sentirse deseadas nuevamente.
La infidelidad puede proporcionar una validación y un aumento temporal del ego que, aunque perjudicial para la relación, satisface una necesidad emocional interna. Esto se da mayormente cuando en la casa no se sienten valorados/as.
3. Ausencia de compromiso
El miedo al compromiso o la incapacidad para mantenerlo también puede llevar a la infidelidad. Algunas personas pueden sentirse asfixiadas dentro de una relación a largo plazo y perciben la infidelidad como una forma de recuperar la sensación de libertad e individualidad.
4. Oportunidad, curiosidad y aburrimiento
En muchísimas ocasiones, la infidelidad ocurre simplemente porque surge la oportunidad. La disponibilidad de tecnología y redes sociales ha facilitado el contacto con nuevas personas.
La curiosidad, acompañada de situaciones tentadoras, puede llevar a decisiones impulsivas que resultan en infidelidad. Aquí entra uno de los hallazgos más peligrosos que conduce hacia la infidelidad → el aburrimiento. Atácalo antes que te devore a ti.
5. Por venganza
La infidelidad puede ser un acto de venganza en respuesta a sentimientos de resentimiento o enojo acumulado hacia la pareja. Ya sea por una infidelidad previa o por otras heridas emocionales, algunas personas eligen ser infieles como una forma de ajustar cuentas.
¿Y qué pasó con Ana y Luis?
Dado que Ana descubrió que no podría vivir con el recuerdo de una infidelidad decidió dar por terminada su relación con Luis y seguir su camino. Doloroso proceso el de Ana. Pero su decisión le dio la fortaleza para iniciar el proceso hacia la recuperación de una traición.
Con la mira en la redención
La infidelidad es una de las experiencias más dolorosas que una persona puede enfrentar en una relación.
La traición puede desgastar la confianza, dejar heridas emocionales y provocar un torrente de emociones difíciles de manejar. Sin embargo, es posible recuperar la estabilidad emocional y avanzar hacia la sanación ya sea que la relación se haya terminado por completo o no.
A continuación, te presentamos algunas claves para ayudarte en ese proceso:
1. Permite que tus emociones fluyan
El primer paso para recuperarte de una infidelidad es permitirte sentir todo el espectro de emociones que se presenten: dolor, rabia, tristeza, confusión y, en ocasiones, incluso alivio (Cuando hace rato quieres salir de una relación que ya no te complace).
Estas emociones son normales y forman parte del proceso de duelo. No te presiones para “estar bien” de inmediato; el tiempo es esencial. Poco a poco te iras liberando.
2. Habla sobre lo ocurrido
Buscar apoyo es lo primero. Hablar con amigos, familiares o un terapeuta puede ayudarte a procesar lo que has vivido. Expresar tus sentimientos y preocupaciones en un entorno seguro puede aliviar la carga emocional y permitirte ver la situación desde diferentes perspectivas.
3. Reflexiona sobre la relación
Después de haber permitido que tus emociones fluyan, es importante reflexionar sobre la relación en su conjunto. Pregúntate si hay cosas que te llevaron a esta situación y si la relación aún tiene fundamentos sólidos. Analizar los patrones y retos subyacentes puede ofrecerte claridad sobre el camino a seguir.
4. ¿Honestidad y transparencia?
Si decides reconstruir la relación con tu pareja, establece límites claros. Ambos deben analizar cómo se puede restablecer la confianza, las expectativas sobre el futuro y los compromisos que están dispuestos a contraer.
La honestidad y la transparencia son esenciales en este proceso si piensas que todavía queda un grano… Y como mencionamos anteriormente…ataca el aburrimiento.
5. Trabaja en ti
El tiempo de recuperación es una excelente oportunidad para enfocarte en tu propio crecimiento personal. Dedica tiempo a actividades que te apasionen, retoma hobbies olvidados y trabaja en tu autoestima.
Este es el momento de redescubrirte y fortalecerte. Piensa que tu vida va más allá de tu relación, la cual es solo parte de tu existir.
Reconócelo y amplia tus horizontes. Te aseguro será tu mejor decisión. Dame las gracias después…
6. Considera la terapia
La terapia individual y/o de pareja puede ser extremadamente beneficiosa en el proceso de recuperación. Un profesional puede ofrecer herramientas y estrategias específicas para ayudarte a manejar el dolor y fomentar la comunicación con tu pareja, en caso de que decidan continuar juntos.
De no ser así, tendrás entonces más claridad sobre la importancia de tu propia vida y como seguir mejorando.
7. Práctica la autocompasión
Sé amable contigo misma. Necesitas reconocer que estás atravesando un momento desastroso y que autocastigarte solo agravará el dolor. Practica la autocompasión, y entiende que cometer errores es de humanos y date la libertad de sanar a tu propio ritmo.
Recuperarse de una infidelidad es un proceso que requiere tiempo, paciencia y esfuerzo. No hay fórmulas mágicas, pero al permitirte sentir, reflexionar, buscar apoyo y trabajar en ti misma, puedes encontrar un camino hacia la sanación.
Recuerda que, independientemente de las decisiones que tomes, tu bienestar emocional y tu felicidad siempre deben ser tu prioridad. Al final del camino, lo más importante es aprender, crecer y reconstruir tu vida desde un lugar de fortaleza interior.
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