
Levante la mano aquella que se ha sentido dichosa pensando que su relación es de película, vibrante y llena de promesas, pero que al final resulta ser un laberinto de desilusiones…yo me incluyo.
¿Qué sucede cuando tu dedicación y sacrificio no encuentra eco y al final se convierte en un mero vacío?
Hoy exploraremos la experiencia de darlo todo en una relación que, a pesar de los esfuerzos, parece no dar frutos.
Le echaremos un ojo a las señales de advertencia, las lecciones aprendidas y, sobre todo, a la importancia del amor propio en el camino hacia la sanación cuando te enfrentas a una situación como esa.
Reconocerás que aunque hayas atravesado por ese angustioso momento no es justo que tu futuro sea arruinado por ello.
Chequea → Confesiones de una infiel
Lo di todo y no pasó nada
Laura era una mujer amable y soñadora.
Desde joven, había idealizado el amor, imaginando una relación perfecta llena de risas, complicidad y apoyo incondicional.
Cuando conoció a Miguel, un hombre carismático y divertido, sintió que finalmente había encontrado a su alma gemela.
Al principio, la relación fue mágica.
Compartían sus intereses, hacían planes y disfrutaban de largas charlas bajo las estrellas.
Sin embargo, a medida que el tiempo pasaba, Laura comenzó a notar pequeñas fisuras en su relación.
Miguel, aunque cariñoso, era desorganizado y un poco pata caliente.
Laura, decidida a construir la relación perfecta que anhelaba, se esforzó al máximo para construir una relación sana.
Cocinaba sus platos favoritos, siempre le ofrecía apoyo en su trabajo y organizaba escapadas románticas.
Laura se convertiría en la compañera perfecta, el pilar de la relación, sin embargo, con el tiempo, su dedicación comenzó a ser un peso en lugar de un regalo.
Miguel, acostumbrado a la entrega incondicional de Laura, comenzó a dar por sentado sus esfuerzos.
Las pequeñas quejas que Laura planteaba sobre su falta de compromiso y atención se perdían en el aire, y él, con su naturaleza distraída, no percibía la creciente tristeza que anidaba en ella.
A pesar de todo lo que ella hacía por él, algo en su interior le decía que su amor no era recíproco; sentía que estaba dando más de lo que recibía.
Un día, después de una serie de situaciones en las que Laura se sintió ignorada y desvalorizada, decidió hablar con Miguel.
Con el corazón en la mano, le expresó sus sentimientos.
“Siento que estoy haciendo todo por nosotros y que, a cambio, recibo muy poco”, dijo, con la voz temblorosa.
Sin embargo, Miguel, sin reconocer la gravedad de sus palabras, respondió con una sonrisa despreocupada, “!Pero, estamos bien chica, solo tienes que relajarte un poco!”.
Fue en ese instante que el mundo de Laura se comenzó a desmoronar. Se dio cuenta de que, a pesar de todos sus esfuerzos, estaba sola en esta batalla por el amor.
La frustración y la tristeza la envolvieron, y decidió tomar la dolorosa decisión de alejarse.
Soltera y sin compromiso: no hay problema.
Olvídate de darlo todo en una relación
Darlo todo en una relación de pareja significa comprometerse plenamente con la otra persona, aportar esfuerzo y dedicación para construir y mantener una conexión sólida y saludable.
Suena romántico pero nada en exceso es bueno y ser la que da todo para tener una relación perfecta de seguro no te rendirá frutos.
En una relación ambos tienen que poner de su parte para que las cosas marchen. O sea, cuando no existe la reciprocidad en tu relación, la desilusión, los cuernos y el fin está muy cerca.
Laura hacía todo por Miguel al punto de perder su verdadero yo. En ocasiones ocultaba sus propios sentimientos para complacerlo.
Le permitía todo, incluso hasta las infidelidades. Muy probablemente conoces a una amiga que muestra esas características. Es la pendeja del barrio (PdB) como cariñosamente la conocemos.
Darlo todo en una relación de pareja puede parecer noble, pero hay varios aspectos que indican que esta actitud puede ser perjudicial, como por ejemplo:
1. Pérdida de la identidad:
Cuando una mujer se dedica completamente a su relación, puede comenzar a descuidar sus propios intereses, necesidades y aspiraciones. Esto puede llevar a una pérdida de identidad individual. ¿Y quién k-rajo quiere navegar por la vida como un espanta pájaros? Decide tu camino sola o acompañada.
2. Desbalance en la inversión:
Si lo das todo en tu relación y el caballero ni se mueve, se crea un desbalance en la relación. Esto puede generar resentimiento, frustración y una sensación de desilusión. Las que más pierden son aquellas damas que se dan cuenta de su desventaja después de años de servidumbre. Asegúrate que esa no seas tu.
3. Expectativas poco realistas:
La idea de que darlo todo en tu enyunte es lo necesario puede dar por sentado de que la otra persona hará lo mismo. Esto a menudo resulta en decepciones cuando las necesidades y deseos de ambos no están alineados. O sea, cuando te escocotas complaciéndolo y él ni cuenta se da.
4. Dependencia emocional:
Entregarse por completo puede fomentar la dependencia emocional, donde sientes que la felicidad o bienestar depende completamente de tu pareja. ¿Y qué demonio es eso? Eso ciertamente no es saludable y puede resultar en relaciones tóxicas. Mantener la individualidad es ley de vida para todos y merecemos sentirnos a gusto en nuestra propia piel, no en la del otro…
5. Ausencia de límites:
Darlo todo sin establecer límites puede llevar a la explotación emocional o física. Hay que mantener un equilibrio saludable y cuidar de las propias necesidades. Acaba con la “buenaza” que existe en ti cuando a ‘darlo todo’ se refiere. Si te vendes barata ese macharrán aportara poco o nada. Abre la boca y expresa lo que necesitas y deseas de ese hombre y así se sentarán las bases para una relación equitativa y por ende saludable.
Si el hombre esta retirado y tú todavía participas de la fuerza laboral, ¿cómo están haciendo para equilibrar la labor domestica? Dale pensamiento…
6. Menospreciar el autocuidado:
Al centrarse exclusivamente en la pareja, se deja de lado el autocuidado, que es esencial para el bienestar personal. El tiempo y la atención que se necesitan para uno mismo son igualmente importantes.
Mirna dejo a un lado sus estudios de enfermería para que su amorcito estudiara leyes. No hubo una decisión analizada en el asunto y simplemente Mirna permitió que Manuel persiguiera su sueño de ser abogado sin pensar en sus propias aspiraciones.
Ese permiso sin sopesar las consecuencias le costó muy caro a Mirna ya que poco tiempo después de graduado, Manuel cogió calle con otra compañera de estudios dejando a Mirna desprovista de apoyo tanto emocional como económico. Ya te escuché…y si, Mirna se matriculó en las PdB (pendejas del barrio) ese mismo día.
En una relación sana, (ya lo sabes hace rato) resulta crucial encontrar un equilibrio donde ambos miembros se sientan valorados, respetados y apoyados, sin sacrificar su individualidad en el proceso. La clave es mantener un compromiso con la pareja, al mismo tiempo que se persiguen los propios sueños y aspiraciones. No aceptamos nada unilateral.
5 Ideas para mantenerte fuera del club de las PdB
- Asegúrate de fomentar un ambiente donde AMBOS se sientan cómodos expresando sus pensamientos, sentimientos y necesidades.
- Definir claramente lo que cada uno necesita y espera de la relación. Esto incluye límites en el tiempo, espacio y emociones.
- Ambos deben comprometerse al mismo nivel en la relación. Esto significa que ambos deben aportar tiempo, esfuerzo y recursos, evitando que uno sienta que está dando más que el otro. Te aclaro que la mujer tiende a ser más laxa en esto, siempre pensando que debe dar la milla extra.
Quizá es su naturaleza. Asegúrate que tu millaje en la relación sea casi el mismo que recorre tu pareja. Y si no lo es pues que el exceso lo de ese compañero porque tú te lo mereces.
- Priorizar el autocuidado es esencial. Cada persona debe dedicar tiempo a sus propias pasiones, amigos y bienestar emocional. Esto no solo enriquece la vida individual, sino que también beneficia a la relación. O sea, que te asegures que el también intervenga en la cocina o si eso no es posible que muestre gestos de que aquilata la relación haciendo la aportación que está a su alcance.
¿Qué te parece el que Efraín le tiñe el cabello a Sara ya que están en un aprieto económico y el salón quedó fuera del presupuesto?
- Cada persona debe tener espacio para crecer y desarrollarse como individuo. Apoyarse mutuamente en intereses personales y metas ayudará a fortalecer la conexión, al tiempo que se respeta la individualidad. Eso suena muy bonito por cierto pero todas sabemos que las relaciones de pareja son complicadas. Verifica cuáles son tus sueños para el futuro independiente de tu relación, y arranca tras ellos.
Reiteramos que las relaciones de pareja no deben sostenerse unilateralmente, siempre debe haber un balance. Si quieres ser feliz sintiéndote valorada, no lo des todo. Analiza la situación con tu pareja entrando en un acuerdo de cómo se asumirán las responsabilidades y lo que esperas en términos de cariñitos, sexo y lo que sea importante para ti. No te arrepentirás.
¡Déjanos saber si hubo berrinches en el proceso! 😊Comenta…
Lee también “LA TÉCNICA DEL CLAVO.” De seguro te gustará el enfoque.
Visítanos en FACEBOOK PINTEREST INSTAGRAM.
SUSCRÍBETE para ser notificada de todo lo que viene. ¡No te despegues! y recuerda dejar un COMENTARIO
Visítanos en FACEBOOK PINTEREST INSTAGRAM.
Si careces de tiempo para leer y prefieres escuchar cualquiera de tus artículos preferidos ve a nuestro canal en YOUTUBE